Karsten

Cuando me di cuenta de que era trans, no sabía qué era trans. Recuerdo estar de vacaciones en familia en Italia en 2016 a los 15 años y verme en el reflejo de los escaparates. Solía usar solo jeans ajustados pero, como se suponía que hacía mucho calor, usé pantalones cortos cargo de niño. También usé una gorra de béisbol al revés que compré en Roma. Al verme en las ventanas, me percibí como hombre y me di cuenta de lo mucho más cómodo que me sentía. También vi a otros chicos de mi edad durante el viaje y pensé “yo podría lucir así”. Cuando llegué a casa, descubrí que otras personas también se sentían como yo y comencé a vendarme el pecho y a cambiar mi estilo para lucir más masculino.

Tuve dificultades para obtener la atención médica trans que necesitaba. La primera persona endocrinóloga adonde fui cuando tenía menos de 18 años me entrevistó pero determinó que no era trans. Sin embargo, después de cumplir 18 años, logré encontrar une médique que me proporcionara testosterona con una nota de mi terapeuta. Sin embargo, este endocrinologue desapareció repentinamente un año después, pero mis amigues trans en el área me recomendaron una práctica cernaca que he estado usando durante los últimos 3 años. También tuve dificultades para hacerme la mastectomía. Le primer cirujane adonde fui aceptó pero mi seguro me envió una carta informándome que no cubren “cirugías transexuales“, tuve que esperar aún más. Une amigue míe se sometió a una mastectomía a principios de 2021 y me ayudó a ponerme en contacto con este cirujane. Me dieron cita bastante rápido debido a una cancelación y me operaron en septiembre de ese año. La mayoría de mis recursos para mi transición médica provienen directamente de otras personas trans, por lo que le debo mucho a la fuerza, cercanía y el compañerismo de la comunidad trans para que pueda actualizar el futuro que vi para mí como trans.