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Aunque había salido(del closet) años antes, cuando tenía 20 años, no fue hasta que tuve la mastectomía hace seis meses que sentí que mi futuro estaba lleno de oportunidades. Me dio más confianza de que se puede lograr el cambio, pero también sé que incluso si decido no quedarme con testosterona para siempre o tomar medidas adicionales en mi transición, siempre tendré los cambios positivos que experimenté gracias a mi cirugía superior.

Planned Parenthood (Planificación familiar) ha sido un recurso importante para mí. Cuando estaba explorando comenzar con la testosterona fue bueno no tener que investigar a les médiques para encontrar a alguien que estuviera dispueste a tratarme. Pero también agradezco a mi médique de atención primaria e incluso a mi dentista, quienes respondieron a la noticia de mi transición con amabilidad y respeto. Tener que revelarme a les proveedores médiques ha sido uno de los aspectos más estresantes de la transición para mí, y tener estas interacciones positivas ha sido útil. También estoy agradecida de que mi seguro de salud haya cubierto la mayoría de los costos asociados con mi terapia hormonal y mi cirugía superior. Cuando salí (del closet) por primera vez, mi seguro de salud excluía específicamente la cobertura de cualquier atención de afirmación de género, y pensé que pasaría mucho más tiempo antes de que pudiera pagar el tratamiento.