El momento fue cuando vi la portada de una revista Teen Cosmo donde decía “Yo era una niña” y la persona en la portada había comenzado su transición, su nombre era Lace y tenía que contactar a esta persona sin importar nada, y lo hice. Fue entonces cuando escuché por primera vez el término "transgénero" y Lace tuvo la amabilidad de guiarme a través de los pasos que debía seguir para llegar a donde estaba en ese momento. Crecí con muchos desafíos y contratiempos, pero tan pronto como comencé a abordar mis necesidades, el deseo de adormecerme y escapar disminuyó lentamente.